Azúcar oculto


¿Cuánto azúcar crees que consumes al día? 

Cuando alguien formula esa pregunta solemos pensar en la cucharadita que añadimos al café, por lo que la respuesta más habitual suele ser: “No mucho”. Lo que no tenemos en cuenta es la cantidad de azúcar oculto que llegamos a consumir en un día gracias a zumos industriales, refrescos, bebidas energéticas, productos de pastelería, chocolate, lácteos ultraprocesados, cereales, galletas… Todos ellos elevan la cantidad de azúcar diaria sin darnos cuenta. 

Cuando coloquialmente hablamos de azúcar nos referimos en concreto a la sacarosa. Esto es el azúcar de mesa, el de los terrones. Se trata de un azúcar libre.

Actualmente la OMS aconseja que nuestro consumo de azúcar libre no supere los 25g diarios pero la media diaria en España se encuentra en 75g. 

Nos podemos encontrar con dos tipos de azúcares libres: 

  1. Azúcar añadido: Aquí entra el azúcar común (sacarosa) que añadimos al café o a los postres, por ejemplo; y el azúcar que figura en la lista de ingredientes de un alimento, como el que contienen los refrescos, las galletas, los cereales, la bollería, el cacao soluble, algunos panes blancos, etc.
  1. Azúcar naturalmente presente en algunos alimentos y que tiene efectos similares en nuestro organismo al azúcar añadido. Este es el caso de la miel, los siropes y los zumos.

Estos azúcares aparecen en las etiquetas con diferentes nombres: Sacarosa, Fructosa, Dextrosa, Maltodextrinas, Jarabe de maíz, Sirope de agave, Polialcoholes: eritritol, sorbitol, manitol, xilitol 

Aquí os dejamos una serie de productos que tienen azúcar oculto: 

  • Yogures con sabores: Salvo los yogures naturales SIN edulcorar, el resto y sobre todo los de frutas contienen normalmente mucho azúcar añadido, se etiqueta como 0% y pensamos que son saludables, porque no contienen grasa, pero presentan más azúcar que la «fruta» que se supone que llevan
  • Cereales de desayuno tipo granola: se suelen vender como saludables pero la mayoría suelen llevar azúcar. Mira los ingredientes. La mejor opción es hacer granola casera. 
  • Zumos: los zumos industriales contienen mucho azúcar, tanto de la propia fruta como también azúcar añadido. Es muchísimo mejor tomar la fruta entera que hacerse zumos, ya que al hacer el zumo quitas toda la fibra. La fibra es esencial para bajar el indice glucémico de la fruta y que tenga menos impacto sobre la liberación de insulina a la sangre y sea más difícil acumular grasa.
  • Salsas de ensaladas y carnes: las salsas tienen mucha concentración de azúcar. Te recomendamos saborizar tus platos  con especias o salsas caseras.